En 2022, la American Heart Association actualizó su lista de factores esenciales para la salud cardiovascular, incorporando los hábitos de sueño como un pilar clave. Dormir bien no solo nos ayuda a sentirnos descansados, sino que también es fundamental para la salud del corazón y el cerebro.

Según el National Heart, Lung, and Blood Institute, una buena calidad de sueño puede:

• Reparar el corazón y los vasos sanguíneos.
• Regular el equilibrio hormonal.
• Ayudar a controlar los niveles de glucosa en sangre, reduciendo el riesgo de diabetes.
• Favorecer el crecimiento y desarrollo saludable.
• Fortalecer el sistema inmunológico.
• Reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, hipertensión y accidentes cerebrovasculares.

¿Por qué el sueño afecta la salud del corazón?

La evidencia científica muestra que un sueño interrumpido o insuficiente puede elevar la frecuencia cardiaca, activar el sistema nervioso simpático y aumentar la presión arterial, incrementando el riesgo de hipertensión. Además, la falta de sueño consolidado impacta la regeneración celular y el equilibrio de la respuesta inmune, contribuyendo al estrés oxidativo, un factor clave en el desarrollo de enfermedades cardiovasculares.

Consejos para mejorar la higiene del sueño

La Dra. Julia Santin, directora del Centro del Sueño UC, recomienda seguir estas medidas para mejorar la calidad del descanso:

• Evitar estimulantes como café, té, alcohol y nicotina.
• Eliminar las siestas prolongadas.
• Reducir el uso de pantallas antes de dormir y optar por leer un libro.
• Bajar la intensidad de la luz y relajarse al menos 15-20 minutos antes de acostarse.
• Evitar trabajo estresante o ejercicio intenso justo antes de dormir.
• Ir a la cama solo cuando se tenga sueño y mantener un horario estable para despertar.

CENDHY entrega esta información en el marco del Día Mundial del Sueño, reafirmando su compromiso con la salud cardiovascular y el bienestar.